Asistencia al Viajero
Todo viajero con experiencia sabe que, al momento de partir rumbo a otro país, ya es tarde para pensar en las cosas que se necesitan: eso debe ser hecho antes, como el adquirir una asistencia al viajero para poder hacer del viaje, un momento único.
Si te pones a conversar con todos los pasajeros de un vuelo, podrás notar que todos viajan por diferentes motivos: están lo que embarcan por primera vez rumbo a un período de vacaciones. Otros, ya muy acostumbrados, lo hacen por motivos laborales. Están lo que viajan para participar en un congreso, o los que están allí para ir a visitar a familiares o amigos.
Hay un denominador común a todos ellos, y es la ansiedad y el estrés –en unos más, en otros menos- que un viaje provoca. Sucede que son muchas las cosas que se deben hacer antes de emprender un vuelo. No es sólo tomar un bolsito, llenarlo con algunas piezas de ropa y listo. ¡No es así!
Hay que saber hacia dónde se viaja para poder llenar la maleta con el vestuario adecuado. Hay que comprar los pasajes y, en ese momento, averiguar en la compañía aérea sobre el equipaje permitido. Hay que consultar en la oficina consular correspondiente, si hay necesidad de solicitar una visa o de aplicarse una vacuna.
Por otro lado, hay que llegar con suficiente antecedencia al aeropuerto, para tener tiempo de hacer todos los trámites con calma y poder embarcar en tu vuelo con tranquilidad, sin agitación ni nervios. Además, embarcar en primer lugar te dará la opción de acomodar tu equipaje de mano en el lugar que corresponde!
¿Qué mejor que disfrutar el viaje desde el inicio, sin problemas y a puro disfrute?
Por eso, jamás hay que olvidarse de adquirir una asistencia al viajero, porque sólo de esa manera podrás tener la seguridad de estar protegido si alguna sorpresa desagradable surgiera durante tu permanencia en el exterior.